Villafranca Sicula, ciudad situada en la colina de San Calogero a unos 370 metros sobre el nivel del mar, es un próspero centro agrícola que queda a más de de 60 km de Agrigento; su territorio está incluido en el área de producción de la naranja de Ribera.

La ciudad fue fundada en 1499 por la noble familia de Alliata de Pisa que habían comprado la tierra en 1496 del monasterio de San Jorge de Triocala; obtuvieron el título de príncipes en 1609 y eran señores feudales hasta 1812. El valle estaba habitado por los Sicanos, empujados en el centro-oeste de la isla por los sicilianos, pueblo guerrero de la península, y por lo Elimios procedentes de la Turquía de hoy .

Se afirma que el nombre de Viliafranca se ha dado o por el hecho de que las personas que se establecieron en la nueva aldea se concedieron numerosas exenciones, o porque el técnico a cargo de la familia Alliata que eligió el lugar donde levantar la ciudad se llamaba Calcerano Viliafranca. Este pueblo fue habitado por una colonia de trabajadores procedentes del centro de Trapani de Salaparuta, anteriormente fundada por la familia Alliata.Los bienes históricos y artísticos de hoy,que el pueblo conserva intactos son el resultado de la generosidad y el amor por el arte de la familia Alliata.

Monumentos para visitar

En el Corso Vittorio Emanuele, está la Iglesia central, virgen del Mirto, fundada en el 600 y reconstruida en el 700, a continuación, dañada por el terremoto de 1968.

En la misma calle, están la Iglesia del Carmine, del 500 y la Iglesia de San Juan Bautista del mismo siglo.

La ciudad también tiene una rica herencia de  "murales", realizados en 1991 por el pintor Giovanni Smeraldi de Villafranca y consta de cuatro grandes obras que representan diversas tradiciones del pueblo.