Pintoresco pueblo de 7.000 habitantes situado en la cresta de un alto promontorio rocoso (950 m.) La parte superior de la que surge el castillo normando llamado de "Sibilla". Mirador de los más bellos de la provincia, desde el acantilado se puede ver la costa meridional siciliana de Marsala a Agrigento y en el otro lado el valle de Verdura. En las noches de invierno del pueblo blanco de la nieve e iluminado por cortinas de luz, toma la forma de un gran mágico pesebre suspendido en la niebla.

Caltabellotta tiene orígenes antiguos y surge, algunos argumentan quizás errados, en el sitio de la antigua Camycus sede del legendario rey Sicán Kokalos. Es cierto,sin embargo, que surge aquí al final del siglo II aC Triokala, la ciudad de los esclavos. El lugar fue destruido por los romanos y más tarde ocupada por los árabes que la llamaron Kal'at al-Ballut (Fortaleza de los Robles). Ocupada por el conde Ruggero en 1090, vio la reconstrucción del castillo por los normandos. Aquí se firmó la "paz de Caltabellotta" entre Federico de Aragona y Carlos de Valois el 19 de abril 1302 al final de la guerra de las Vísperas entre angevinos y aragoneses, que reconocía la primera supremacía sobre Sicilia.

Monumentos para visitar

Patrimonio artístico e histórico notable conservado en sus iglesias. En el centro del pueblo, en la plaza  Umberto I, por un lado, el Ayuntamiento y por el otro, la Iglesia del Carmine; La iglesia conserva la virgen delle Grazie, estatua de Gaggini.

Al subir a la parte más antigua, se llega a la antigua Iglesia central, la Virgen Maria de la Asunción en 1330, ubicada en el hermoso valle verde.

Al pie del acantilado Gogala, está la Iglesia de San Agustín que presenta un implante del siglo XIV del cual permanecen el pequeño portal lateral y el campanario gótico; en la fachada hay una gran portal barroco. En el interior hay un grupo barro pintado, obra de Ferraro.

Subiendo por una escalera tallada en la roca, se llega a las ruinas del castillo, en una hermosa ubicación con vistas a los alrededores. Construida sobre una colina de 200 metros de altura, en el siglo XII para proteger las zonas de los alrededores, primero perteneció a la familia Peralta y luego a la poderosa familia de la Luna.

Las Necrópolis sicanas. El territorio de Caltabellotta está lleno de tumbas sicanas que se muestran a lo largo de las gargantas rocosas de la ciudad, algunas de ellas son de gran valor arquitectónico

 No se pierdan   

Visita al Eremo di San Pellegrino

 Fue el hogar hasta la muerte del obispo Santo, que, según la tradición popular, liberó la ciudad del dragón que se alimentaba de carne humana. El santuario está formado por dos cuevas, un monasterio y una iglesia.